El querido Maestro Targaz-El, quien en vida fue
Teresa,
llenó unos años de su vida soñando y queriendo
dibujar sus sueños.
E
stos sueños recogen todo el abanico de lo que se puede expresar pintando.
U
só lápices de carbón, crayón y acuarelas para plasmar todo lo que quiso representar.
L
as obras expuestas aquí, resultan una pequeña muestra de todas las que ha dejado.
H
asta sus últimos días disfrutó dando salida a su impulso artístico. |